¿Cómo medimos el éxito de una ciudad? ¿Se trata solo de tener menos tráfico y más edificios? La planeación urbana moderna busca ir más allá, enfocándose en un concepto central: la calidad de vida, un indicador clave del bienestar humano. Pero para mejorarla, primero hay que poder medirla.
La actualización del Programa Municipal de Desarrollo Urbano (PMDU) incorpora nuevas y sofisticadas herramientas para lograrlo. Hoy exploraremos dos de las más importantes: el Índice de Bienestar y las Unidades de Gestión Patrimonial (UGP), instrumentos clave para planificar una ciudad más humana y con identidad.
El Índice de Bienestar: Poniéndole Número a la Calidad de Vida
El PMDU integrará un Índice de Bienestar, una herramienta que permite evaluar de manera completa y objetiva la calidad de vida de la población para poder orientar políticas públicas más precisas. En lugar de basarse en suposiciones, este índice medirá el acceso real de los ciudadanos a los servicios y equipamientos que son fundamentales para una vida plena.
Las dimensiones que se evaluarán para cada zona de la ciudad son:
- Salud: El porcentaje de población con acceso peatonal a centros de salud públicos como clínicas y hospitales.
- Educación: El porcentaje de población con acceso peatonal a instituciones educativas públicas.
- Cultura: El porcentaje de población con acceso a bibliotecas, casas de cultura o museos.
- Deporte: El porcentaje de población con acceso peatonal a unidades deportivas o espacios para ejercicio al aire libre.
- Seguridad: La percepción de seguridad, la incidencia delictiva y las condiciones de riesgo en el entorno urbano.
- Entorno: Las condiciones físicas y urbanas generales que impactan directamente en la calidad de vida de los habitantes.
Con estos datos, el IMIP y el Ayuntamiento podrán identificar con precisión qué colonias necesitan más inversión en salud, qué barrios requieren más espacios deportivos o dónde es urgente mejorar la seguridad, tomando decisiones basadas en evidencia.
Unidades de Gestión Patrimonial (UGP): Protegiendo Nuestra Identidad
Una ciudad no es solo su presente, también es su historia. Para asegurar que el desarrollo no borre nuestra identidad, un principio fundamental para organismos como la UNESCO, el nuevo PMDU establece las Unidades de Gestión Patrimonial (UGP).
Una UGP es un marco para organizar la identificación, conservación, uso y promoción del patrimonio de un territorio en todas sus dimensiones. Es un enfoque innovador que integra la herencia cultural y natural dentro de los procesos de desarrollo territorial sostenible.
Estas unidades protegerán de forma integral:
- Patrimonio natural: Recursos geológicos, flora, fauna y paisajes naturales.
- Patrimonio cultural tangible: Monumentos, edificaciones históricas y sitios arqueológicos.
- Patrimonio cultural intangible: Tradiciones, saberes, gastronomía y música local.
Para Pachuca, esto significa una gestión especializada de áreas tan importantes como el Centro Histórico, los barrios fundacionales y nuestro valioso patrimonio industrial y minero.
“Las UGP son el instrumento para equilibrar el crecimiento con la conservación, asegurando que el alma de Pachuca se preserve para las futuras generaciones.”
Planificando con Datos y Corazón
Estas dos herramientas, el Índice de Bienestar y las Unidades de Gestión Patrimonial, demuestran un profundo cambio en la forma de hacer urbanismo. Por un lado, se usarán datos duros para tomar decisiones justas y eficientes (el “cerebro” del plan). Por otro, se crearán mecanismos específicos para proteger nuestra historia, nuestra cultura y nuestra identidad (el “corazón”).
Con una planificación así, Pachuca no solo aspira a ser una ciudad más ordenada, sino también un lugar con mayor bienestar y un profundo respeto por su legado.